12/11/09

Adiós a una amiga




No quiero hacerlo largo porque tener que escribir esto, es muy duro.
Ha muerto una grandísima aficionada y amante al caballo, mi amiga y compañera de paseos Ute, el mundo del caballo, ha perdido a una magnifica aficionada. Escribir esto, todavía me parece increíble, ha sido una muerte inesperada, no sé cuál ha sido la razón pero su corazoncito alemán, dejó de latir el día 31/10/2009 para horrible sorpresa de los que la tratábamos y compartíamos algo con ella. Todavía me parece que va a sonar el teléfono y voy a oír tu voz con tu acento tan fuerte tan contrario a tu personalidad. Ya sabemos que cuando muere alguien, todos ensalzamos sus virtudes pero en el caso de Ute, es que no he llegado a verla nunca con mal talante, ni de mal humor nunca, era una persona muy alegre, llena de vida y que cuando salía con su caballo (curiosamente llamado Mosat) era la mujer más feliz del mundo, siempre sonriendo y con un brillo estelar en sus ojos claros. Además del dolor y la pena que me ha dejado su marcha, me ha hecho mucho daño, ver como las personas somos tan poca cosa. Tenía una perra, un gato y el caballo, todos ellos han quedado desamparados, la persona que compartía su vida, no compartía sus sentimientos hacía los animales. Esto es tremendamente duro, el gato, salió de casa de mala manera, a su “independencia”, la perra, buscando a cualquiera que la quisiera (no sé donde acabará) y el caballo... eso es lo peor debido a que es un caballo con algo de problemas, ella decía que cuando salía flipando... la verdad es que yo he salido con ella desde Abril y nunca le he visto haciendo nada malo pero los demás dicen que si y por otro lado, tiene una cojera de la mano izquierda, que a ella no le importaba porque es verdad que la ha llevado a todos los sitios que han ido los demás pero que a la hora de venderlo, su destino será para hacer comida con él. Si viera esto, no sé como se pondría porque era de esas personas que no solo no le pegaba nunca a su caballo, sino que ni siquiera le reñía. Sus cenizas, forman ya parte del campo y descansa sobre el árbol que tanto le gustaba saltar y que luego de hacerlo, nos miraba riéndose con cara de niña mala porque Luis (nuestro compañero) le reñía. Me llamaba la atención su carácter, siempre he creído, que los alemanes, eran gente seria y seca, ella cada vez que me veía, me abrazaba y al despedirse igual, cuando íbamos a la venta, saludaba a todos y se despedía como si todos fuesen sus amigos más íntimos, era simplemente una persona entrañable. Te voy a echar mucho de menos Ute, donde quiera que estés, espero que estés mejor que aquí y que sea cierto que haya grandes prados y enormes praderas donde puedas disfrutar y descansar.







1 comentario:

Santa Ana dijo...

Ayy Pili que emocionante lo que has escrito, me has hecho llorar, yo no la conocía en persona desde luego, pero algo la conocía por ti, a traves tuyo y por las fotos en las que es cierto que siempre da la apariencia de un ser feliz, descanse en paz Ute.
Es muy bonito lo que has escrito Pili