31/1/09

Candelaria 3


Quiero hablar de otra cosa y es del aspecto religioso. Ya sé que mucha gente dice, que allí, a lo que se va, es al cachondeo, a beber y a todo lo que caiga. No quiero decir que no haya gente que solo vaya a eso pero hay otros que no y no están reñida la alegría con la devoción, he visto muchas veces, a gente que se arrodillan delante de la reja y que por sus mejillas, caen lagrimas de verdadera emoción al contemplar la imagen de Nuestra Señora que tanto impresiona cuando te encuentras delante de Ella. En esta ocasión, en la casa que estábamos, mantuvimos Piluca y yo una conversación con una señora de Coín (no he dicho que en esta casa, había gente de Coín, Málaga, Murcia, nosotras de Cádiz y Algeciras, además de mi sobrinilla que viene de Toledo) y que fue de lo más congratulante porque en medio de los cantes y bailes por sevillanas, se sentó a nuestro lado y empezamos a hablar de la Virgen y de lo que significaba para ella, llevar a su hijo con 10 años (lo lleva todos los años, desde que nació) y que el niño, le profesara, una fe tan grande a la Virgen y que con 4 años lo subieron en brazos, se agarró a los várales y se puso a llorar, cuando su madre le preguntó que le pasaba, dijo que le había pedido a la Virgen, que como su abuelo estaba malito, que se lo llevara al cielo sin sufrir. La Misa que oímos en esta ocasión, era la que celebraba la Hermandad de Triana, no cabía un alfiler, solo se oía rezar y el acompañamiento del coro de la hermandad. A la hora de la comunión, la impartieron varios sacerdotes, en diferentes puntos de la iglesia y se rogó para que la gente, facilitara un pasillo para los que iban a comulgar. Tengo que decir, que al contrario de cómo suele ocurrir, en una Misa de domingo cualquiera, iban cantidad de jóvenes y niños, además de hombres. No es la única Misa que he oído allí y en todas igual. Así que bueno, habrá cachondeo, no digo que no pero también hay rezos y fe. Me gusta especialmente, cuando alguien empieza la retahíla que algunos no conoceréis y es más o menos así: Viva la Virgen del Rocío, Viva la Blanca Paloma, Viva la Reina de las marismas, Viva la Reina del Cielo y Viva la madre de Dios, todos los demás, por supuesto, van respondiendo un viva muy fuerte. ¡Ay! En fin, algo muy bonito y emocionante de vivir y compartir con seres queridos.
En la foto, el estandarte de la hermandad de Triana

Candelaria 2


En mi anterior post, he olvidado decir, algo obvio, es que además de las casas estas, que comento en alquiler, están las de propiedad, gente con recurso suficiente para mantenerlas, artistas, toreros, famosos y por supuesto las hermandades. En esta foto, estamos Piluca y yo delante de la hermandad de Huelva.

El suelo como podéis ver, es todo arena, por lo que para pasear por allí, tenéis que llevar botas y muy cómodas. Se suelen usar el típico boto campero. En la aldea, el caballo es el rey, también entran coches pero la prioridad absoluta, es la del caballo. Si compras o alquilas una casa, tienes que saber, que todas, tienen sus cuadras por lo que no puedes quejarte, si por la noche, hacen ruido porque como he dicho, allí son lo más importante. Recuerdo que nos cruzamos con tres señoras por la noche, iban agarrándose como podían unas a otras y comentando que por donde andaban los peatones, raro es que me callara y no les dijera, por las calles de su pueblo, ja ja.

Aquí veis a Piluca, en la cuadra del hotel, que en realidad, es una casa más, de las del lugar.

En la aldea, hay de todo, algún super, cajero automático, farmacia y restaurantes. Nosotras fuimos a desayunar los dos días a uno, que yo conocía, donde te ponen unas tostadas, con un aceite puro y un jamón ibérico, exquisito. La segunda mañana, pedí permiso para desayunar en una mesa, donde había una pareja, eran un matrimonio de Madrid muy agradables y me contaron, que estaban muy cansados porque habían pasado tres días en la casa de Chiquetete y que no paraban de entrar y salir gente, con lo cual, no habían dormido nada. Les di el teléfono de la casa hotel donde estabamos nosotra y me dijeron, que era una gran idea porque ellos, cada vez que venían, se iban agotados.
Continuaré.






30/1/09

La Candelaria 1º


Voy a empezar intentando explicar un poco, como es la convivencia en la aldea del Rocío. Allí las casas suelen ser de estructura similar, entras en un gran salón con chimenea, donde hay una cocina, barra, baños y al fondo, un patio donde se alojan los caballos, también según el tamaño, los carros, en la parte superior, están los dormitorios y baños Estas casas las suelen alquilar grupos de amigos y se paga entre todos. Llevan cocineros y camareros, de manera que estás en tu casa pero que tienes, quien te haga y sirva la comida y las copas, aunque tu puedes en cualquier momento, coger lo que quieras para comer o beber porque estás en tu casa. Los dormitorios, tienen literas para aprovechar espacio, te puede tocar, en alguna ocasión, dormir también con hombres, nuestro dormitorio, lo ocupábamos mi sobrina, mis amigas Piluca y Cristina y una chica, que no llegué a saber quien era y que estuvo en la gloria porque nosotras, temiendo a la juerga que se suele prolongar hasta por la mañana, habíamos cogido también un hotel y nos fuimos a dormir allí las dos noches que estuvimos, además este, tenía unos boxes fantásticos, donde mi yegua Calandria, estuvo en la gloria, mientras en la casa, hubiese estado, amarrada junta con todos los caballos y yo, ni siquiera, me tuve que preocupara, por el tema de la limpieza. En las casas, se suele recibir visitas, a todos se les invita, también se suele visitar las casa de al lado, en todas, se canta y se baila y reina la alegría general. Donde yo estaba, es el grupo de mi sobrina Rocío, la cual pasó casi todo el tiempo con otros amigos, según me dijo, solo fue a dormir y por no molestar, pensando que yo estaba ya acostada, se metió en otro dormitorio la pobre. Ah he olvidado, que hay que llevar la ropa de cama y de baño, esto no va incluido en las casas. Aunque estés el tiempo que quieras allí, tomando copas, se pone de comer y cenar a una hora determinada, hay unas mesas muy largas, donde todos nos sentamos a comer juntos y se comparte conversación y bromas. Después de la cenar, se espera a las 24 horas, se apagan las luces y en circulo todos, se canta la salve rociera, en el estribillo, nos cogemos de las manos y levantamos los brazos. Olé, olé, oleoleoleoleolé..... al Rocío yo quiero volver, a cantarle a la Virgen con fe, con un olé...... Es un momento, extraordinariamente conmovedor.
Aquí lo dejo para no cansar.

15/1/09

Algo de entrenamiento

Esta mañana estaba el sol fuera, raro fenómeno que no se ve todos los días, así que me hice la idea de ir pronto a la cuadra, en cuanto terminamos de comer, se puso una nube negra amenazante sobre nosotros y largando todo lo que podía por la boca, me fui a la cuadra. Cuando vi a Paco, le pregunté que si iba a llover y me dijo que feo se había puesto pero que él se iba. Así que encima me iba a quedar sola. Le eché la montura a la yegua y me metí en el picadero, trabajamos un rato a galope, solo para que se desbravara un poco y hasta que aguantó mi culete porque además de que ya lo tengo herido, hoy he montado con vaqueros y con una silla nueva, que todavía no está adaptada, por lo que después de unas 40 vueltas, nos fuimos a dar la vuelta al circuito, que con el caballo tardo 45 minutos pero que con la yegua seguro que menos porque es muy ligera y no cambia el paso para nada. Cuando salía del picadero, me di cuenta, que el nuevo dueño de la parcela de al lado (que está haciendo un picadero) se quedó mirando a la yegua detenidamente y mirándola de arriba a bajo, me había estado mirando mientras galopaba y no se me escapó el detalle y es que será pasión de madre pero es que es muy guapa. Estoy un poco preocupada por como reaccionará en el Rocío, por lo que quiero que la semana que viene de lunes a jueves, esté trabajada, aunque sea poco pero a diario.

12/1/09

Menudo susto

Esta mañana, no me encontraba muy bien de ánimo y eso, así que como, había salido el sol y este otoño y lo que llevamos, de invierno, apenas lo hemos visto, me fui a la cuadra, eché la cuenta de los días que llevaba sin trabajar con Amoroso, creo que eran tres, así que le puse la montura y me fui al picadero, dimos unas cuantas vueltas al paso, un poco de trote y un poco de galope, ahí tuve que estar muy atenta, porque se me tropezó y le tuve que prestar rápidamente ayuda con las riendas, creo que si no, nos hubiésemos ido al suelo. Como lo vi relativamente tranquilo, me fui a la calle pero cogí, dirección a la cañada, cruzamos el puente sin mucho problema pero a un pequeño trotecito que en realidad, no me importa mucho, lo que quiero, es que no me la vaya a liar allí y nos metimos en la cañada. Fuimos bien, había mucho fango de la cantidad de agua que ha caído y naturalmente, no había nadie andando ni con la bici, pensé, si me pasa algo, no se entera nadie. Llegamos al punto que yo llevaba en mente para volverme, corría un poco de agua por allí y paré un poco al caballo, hizo como un intento de beber y de pronto se dio la vuelta, para volverse camino de la cuadra, como de ninguna de las maneras, le podemos permitir, que decidan ellos, lo llevé de nuevo al sitio, estuvo dando pataditas para lavarse los cascos, cosa que yo suelo reírle la gracia y de pronto, ni para detrás ni para delante, cogió hacia la izquierda, es una vereda, que va en paralelo, a la autovía pero por debajo, empezó a galopar como un loco y a tirar patadas al aire, o sea a retozar conmigo encima, pasé unos minutos de angustia porque no había forma que parara y no sabía, cuanto podría aguantar yo encima por fin, pude ayudarme con la otra mano para hacer más fuerza y tirar hacía la derecha y después de lanzarme de dar unos cuantos botes varias veces se paró. No sabía que hacer en ese momento, me entraron ganas de darle una paliza pero pensé, que lo mismo, me lo volvía a hacer y puede que la segunda vez, no consiguiera aguantarme, así que lo dejé estar, di la vuelta y vine todo el camino, pendiente que no trotara para que no se calentara y tampoco, le dije nada, que yo suelo hablarle y todo esas pamplinas que se le dicen a los caballos cuando se les quiere mimar. He llegado a la cuadra, dando gracias, que no me ha tirado y después de prepararlo, lo he metido en su box, sin ningún mimo ni ninguna caricia, tampoco le he reñido, aunque eso creo que a él le afecte. La cosa es que me he escapado por tablas, como dicen los taurinos y eso que este es el tonto. No vea como está la lista, como para fiarse vamos.

10/1/09

¡Que gas tiene!






Pues nada, que ya me estoy empezando a preocupara un poco y todo con la yegua. Seguimos con el frío, JuanMa no aparece y no me apetecía dar otra vez la vuelta hoy al circuito, así que me entré con Calandria en el picadero y después de algunas vueltas, al paso ( que lo hago siempre para que caliente músculos )lo cual me costaba bastante porque ella lo que quiere es lanzarse, salimos a galope, 30 vueltas para un lado y 30 para otro. Yo helada y ella tan pancha, la cosa es, que no le tengo ni que arrimar las piernas, se pone a galopar y no quiere parar, así que cuando me cansó ella a mí, nos salimos y lo que hice fue, estar un ratito parada allí en la cuadra sin desmontar y a ver si la semana que viene, me llama mi compañero y le podemos meter alguna subida al monte porque ya me está dando miedo, de llevármela a la Candelaria, a ver si la tía esta, le da por correr y no la pueda parar, aunque no creo porque hasta ahora, los paseos que hemos dado, lo has hecho muy bien. Y eso ha sido todo, me he venido rápida por el frío este que estamos padeciendo todos.
Como se puede ver, también se está volviendo esta muy cariñosa.

9/1/09

Trabajo y besos



Como anteayer, estuve de compras y no pude sacar a los caballos, ayer trabajé, con los dos. Primero entramos Amoroso y yo en el picadero, trote y algún galope, cuando vi que ya estaba sudando y cansado, salimos y entré con Calandria, esta es otra historia, desde el momento en que entra, sabe que va a trabajar y se pone en posición de salir a galope, dimos 60 vueltas al picadero galopando, 30 para un lado y 30 para otro y ahí lo dejamos porque entre vestir, duchar y poner mantas, se me va mucho tiempo.
Hoy me he metido solo con Amoroso y no estaba por la labor de trabajar mucho en el picadero, así que después de un ratito, trotando y un poco de galope, nos fuimos a la calle, dimos la vuelta al circuito chico, he parado en alguna ocasión para descansar y veo que el se pone a un paso muy lento, no entiendo, que en vez de estar espabilado, con el ejercicio, se quede casi parado pero vamos, que lo ha hecho muy bien, a lo mejor lo hacía para que yo me tomara un respiro y ya sabemos que él, aunque es un caballo muy fuerte, es casi todo español y no tiene ni mucho menos el gas y fuelle que Calandria que es casi totalmente inglesa.
Ahí os pongo un besito que nos hemos dado cuando hemos vuelto.

Se acerca La Candelaria


Se acerca La Candelaria, la emoción y el nerviosismo me invade, no lo puedo evitar y mi corazón se acelera pensando en ese momento, que me encuentre en la aldea del Rocío con mi yegua y preparada para seguir la raya hacía Villa Manrique. Nunca he estado pero todo lo relacionado con los caballos, romerías y La Virgen del Rocío, me sacan de quicio, en el buen sentido. A falta de 14 días, ya no puedo dormir, pensando en ese momento. La Gran Señora, La Blanca Paloma, Reina de las Marisma y Madre de Dios, quiera que este año podamos visitarla en su ermita, mi amiga Piluca y yo.

7/1/09

Trocada

Ayer preparé a Calandria y nos metimos en el picadero. Salió fuerte, fuerte, nada más entrar, quiso salir a galope pero la aguanté por lo menos dos vueltas al paso, nos pusimos a galopar para la derecha y la verdad, es que yo iba muy cómoda, llevábamos ya 20 vueltas, cuando oigo a Ismael decirme desde la parcela de Raúl, que la parara que iba trocada, me extrañó porque no noté nada, lo hice y salimos bien pero a las pocas vueltas, me dice que otra vez va mal, ¿pero si ni siquiera la he parado? Le dije, ¿cómo es posible que haya cambiado de mano? Este chico es bastante bueno y si puede ayudar lo hace, así que se vino, ya la había cambiado yo para la izquierda (mi lado malo) y sin embargo, me dijo, para este va bien, a ver ahora el otro y cuando lo hice para la derecha, otra vez mal, por lo que él me aconsejó, que al coger la rienda, la que quedara en el interior, la llevara algo más corta, para que la yegua, llevara la cara hacía ese lado y así, no se trocaba. Lo hice así y salió bien pero a mí me queda ahora, la cosa, de que esta yegua, galopa tan bien, que yo hasta cuando va trocada, no lo noto y mi pregunta es a la experta, para que me dé algún consejo de cómo notarlo.
Salimos luego al circuito y dimos una vuelta muy rápida porque con el ejercicio, que había hecho y lo fuerte que está, no necesitaba ni que le arrimara las piernas, iba como un cohete (sin retrotarse) solo al paso.

6/1/09

Magnifico Amoroso


Solo unas palabras para decir, que dejó de llover pero que aquello está todo lleno de barro y agua, como ya he dicho anteriormente y que había limpiado y engrasado los cascos a Amoroso, por lo que le puse la montura y me fui a la calle del tirón. Desde que salimos hasta que volvimos, lo puse al trote y solo se paró en dos ocasiones, una porque es una cuesta empinada que me da yuyu y otra porque me pararon unos que iban en una moto para preguntar por el refugio de animales. Me vine encantada porque me hizo un trote todo el tiempo, que yo no creí que él fuese capaz de llevar con tan buen ritmo y nada de remolonear y querer pararse, ni tontear mirando para otro sitio, se centró en su trabajo y lo hizo de maravillas, no me resultó ni molesto siquiera, que ya sabéis que trotar no es galopar y que si no llevas bien el ritmo del caballo, te puedes hacer polvo la espalda, pues nada, como he dicho, magnifico Amoroso. Ah el recorrido, que al paso, se echa 45 minutos, lo hicimos en 15.
Podeis ver un par de mechones, de los que le salen por todo el cuerpo en invierno, es curioso porque tiene puesta una manta.



4/1/09

Por fin salió el sol

Hoy por fin no amenazaba lluvia, así que me fui a la cuadra con la idea clara que le tocaba a Calandria pero pensando como lo haría ya que esta no es el caballo y le tengo respeto. Me metí en el “lago” a darle picadero pero después de unos cinco minutos, como vi que yo corría peligro de resbalarme y darme un baño de agua y lodo y ella con el miedo solo iba a trote cochinero, nos salimos, eché la montura y me subí. Cuando llegamos a la puerta del picadero, se me resistió a entrar y al darle con los estribos, se puso a andar para atrás a una velocidad que había que verla, no había forma de pararla, creo que topó con una puerta de alguna corraleta y entonces se paró, con voz dulce y mimosa, la calmé pero enseñándole los estribos y me fui otra vez al picadero, esta vez entró pero estaba muy alterada y me costó que se arrimara para cerrar la puerta, cosa que hizo finalmente. Dimos unas cuantas vueltas al paso y cuando me pareció que podía habérsele pasado el miedo, nos pusimos a galopar. Tengo que decir, que solo le tengo que coger las riendas más cortas y arrimarle la pierna y ya se pone a galope. Dimos 20 vueltas para la derecha, ya la notaba yo más relajada, aunque esta yegua es un muy fuerte, cambiamos a mi lado malo y dimos 5 o 6 porque ella ya parecía que se encontraba bien. Efectivamente, me fui para la puerta y se colocó a la primera de maravillas para que la abriera y nos fuimos a la calle. Hemos dado un paseo muy tranquilo y bueno y por fin, hemos tomado un poco el sol, aunque por algunas zonas, sobre todo, las que están más cerca del río, con el aire que soplaba fuerte, hacía frío. Llegamos muy bien a la cuadra, su poco de agua en las partes baja solo y su regalito de zanahorias, manta y a su box a terminar de comer, que lo había dejado a medias. Otro día que me sirve de relax y a ella para no perder forma.

3/1/09

Todo trote


De pronto, vi un rayo de sol y salí enseguida para la cuadra. Solo bajar a la calle, me cayó un chaparrón tremendo, llegue a la cuadra, lloviendo a mares. Fui a ver a mis caballos y les di unas zanahorias que les llevaba, me daba rabia volverme tan pronto, después de haber ido hasta allí, así que me entretuve en unas cuantas cosas, había un caballo en el patio, que habían castrado hacía un rato pero que lo habían puesto en un sitio que se estaba mojando y daba mala impresión verle sangrando y con el agua, corriendo, así que lo enganche en su box, luego les di de beber a los cuatro de una compañera y ya me disponía a venirme, cuando vi que había dejado de llover y que algunas nubes, se estaban retirando, así que le eché la montura a Amoroso y me fui al pasillo que lleva al picadero, eso son muy pocos metro pero me puse a trotar ahí, viendo que eso era pecata minuta para él, me fui directa al circuito chico y lo puse al trote, solo nos hemos parado para cruzarnos con un par de coches y así tomaba yo un poco de aliento y otra vez lanzados. Normalmente, se tarda en dar la vuelta, 45 minutos y no me he fijado, en cuanto lo hemos hecho pero a Amoroso, le ha sentado de maravilla, ha sudado bastante (está gordísimo) y se ha portado muy bien, cuando estábamos en el pasillo, estuvo dos veces a punto de perder las manos pero yo estaba muy atenta y le apoyé rápida, después en la calle, fenomenal, como lo conozco, cuando veía que algo le llamaba la atención, antes que se asustara, ya le estaba yo dando con las espuelas y la verdad, que me he quedado admirada con lo bien que nos ha salido, sobre todo, el buen trabajo que ha hecho el caballo. Esto no lo puedo hacer con Calandria, que el paseo le sirva de relax porque tendría que ir a galope, ya que les pedí que me la domaran saliendo solo a galope y no quiero cambiar esto. Ya pensaré algo para mañana y darle trabajo también a ella, ya que esta inactividad, les viene fatal a ellos y también a mí.

2/1/09

Tarde humeda

Como la tarde se aclaró un poco, después de tantos días, fui a ver a los caballos. Estaban muy fuertes y aunque en el picadero hay mucho agua y además, habían dejado un potro y una percherona dentro, no estaba muy segura de lo que iba a hacer pero solté a Calandria y a Amoroso por separados y aquello parecía en vez de un picadero, un paseo por la playa. La verdad, es que como siempre, me relajó y me distrajo un rato de tanto estrés sufrido estos días atrás.